San Isidro. 19 de Junio de 2012.
AL
HONORABLE CONCEJO DELIBERANTE
El manifiesto de la UNESCO sobre Bibliotecas
Públicas de 1994.
La Declaración de Copenhague sobre la biblioteca
pública y la Sociedad de la Información (1999)
La trascendencia histórica que han tenido las
bibliotecas populares de nuestra ciudad en la difusión de la cultura local y
nacional; y
CONSIDERANDO:
Que la biblioteca pública es un lugar de encuentro, un
centro de información, conocimiento y recreación. La Declaración de Copenhague sobre la
biblioteca pública y la Sociedad de la Información (1999) resalta y destaca
las facultades que, en la misma, deben prevalecer para su plena integración en
la Sociedad de la Información y del Conocimiento:
· Democracia y ciudadanía: las bibliotecas públicas tienen una
oportunidad estratégica para incrementar la calidad de vida y las posibilidades
democráticas de los ciudadanos de las sociedades de la información,
proporcionándoles acceso libre y equitativo a información de alta calidad
· Desarrollo económico y social:
las bibliotecas públicas apoyan el crecimiento de las comunidades
proporcionándoles servicios de información diseñados para atender las
necesidades locales. Son instrumentos importantes para reducir la disparidad
entre los ciudadanos europeos ricos en información y pobres en información.
Las bibliotecas son la institución pública responsable de hacer posible
y real el acceso a los que no pueden llegar por sí mismos a las fuentes. Es la
base para atender necesidades de orden social de gran importancia, lo que la
convierte en un servicio que no es solo cultural o educativo, sino de
asistencia social en el sentido fuerte del término. Por eso se la relaciona con
la implantación local de la sociedad de la información, con el mantenimiento de
la democracia, la educación, la interculturalidad o la tolerancia.
Por eso decimos que las mismas son una institución compensatoria de las
desigualdades crecientes entre ricos y pobres en información. Tiendo como
función crear, apoyar y consolidar los hábitos de lectura. La lectura es un
medio de placer y estímulo de la imaginación y la creatividad en los niños y
jóvenes desde los primeros años. La lectura enriquece la vida propia a través
de la comunión con otras vidas que se produce en los textos literarios. Amplia
la propia experiencia aportando el conocimiento de otras realidades socia les.
Amplía el lenguaje y ayuda a aprender. Ayuda al encuentro del sí mismo y
favorece la formación de una capacidad crítica.
El manifiesto de la UNESCO sobre Bibliotecas Públicas de 1994 dice en
uno de sus apartados: “Los servicios de la biblioteca pública están concebidos
sobre la base de la igualdad para todas, independientemente de la edad, raza,
sexo, religión, nacionalidad, lengua o nivel social. Los servicios y materiales
específicos deben adaptarse a aquellos usuarios que no pueden, por cualquier
razón utilizar los servicios materiales normales, por ejemplo, minorías
lingüísticas, personas discapacitadas o los que están hospitalizados o en
prisión.”
Esta clase de bibliotecas presentan no sólo un servicio cultural, sino
también social y terapéutico. Desde el punto de vista terapéutico consideramos
a la biblioterapia como una técnica auxiliar de la medicina para mejorar el
estado psicológico de los enfermos combatiendo el aburrimiento, la soledad, la
melancolía, la ansiedad, la pérdida de intimidad. El libro aporta al lector
enfermo la posibilidad de evasión a partir del acceso a la cultura y la entrada
al espacio de la fantasía e imaginación. La biblioteca aporta al lector
enfermo, la posibilidad de encuentro o reencuentro con el placer de leer. La
experiencia de la Primera Guerra Mundial nos ha demostrado que las personas que
estaban al cuidado de los heridos observaron que los pacientes que accedían a
la lectura lograron estar más relajados y psíquicamente mejor.
Desde la dimensión cultural, no podemos olvidar que para la construcción
de toda sociedad democrática el acceso a la cultura y con ella las bibliotecas
públicas resultan un pilar fundamental. Llevadas estas al recinto hospitalario,
el binomio que forman salud y cultura resulta sumamente interesante.
Por todo lo expuesto el Bloque Frente Amplio Progresista (PS-LS-UP)
propone el tratamiento del siguiente:
PROYECTO
DE COMUNICACIÓN
ARTICULO
N°1: Solicitando al Departamento Ejecutivo a través de la
Subsecretaria de Comunicación y Cultura y la Secretaria de Salud Pública, tenga
a bien de crear “Bibliotecas
Hospitalarias”
ARTICULO
N°2: Los y las
pacientes internados/as,
familiares y/o acompañantes de los mismos y el personal hospitalario
serian quienes puedan utilizar este
servicio brindado por las “Bibliotecas Hospitalarias”.
ARTICULO
N°3: A través de
las áreas correspondientes se articule la colaboración con las
bibliotecas populares para organizar, instrumentar y facilitar ejemplares.
ARTICULO
N°4: Los vistos y considerando forman parte de la
presente.
ARTICULO
N°5: De forma.
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